viernes, 15 de febrero de 2013

Off-topic: ¿el último Papa?

A propósito de la dimisión de Benedicto XVI, sobre la cual no me voy a posicionar, lo mismo que no voy a opinar sobre sus 8 años de papado, se ha empezado a hablar y se hablará mucho acerca de si el siguiente Papa va a ser el último.

¿Por qué? Por las llamadas "Profecías de San Malaquías", un libro que contiene 112 lemas muy breves (unas dos o tres palabras) sobre los papas que vendrían desde Celestino II (1143-1144). El penúltimo lema de ese libro haría referencia al todavía actual Papa (recordamos que dejará de serlo el 28 de febrero): De gloria olivae (de la gloria del olivo) y, tras él, se cita lo siguiente:

Petrus Romanus, qui pascet oves in multis tribulationibus: quibus transactis civitas septicollis diruetur, et iudex tremensus iudicabit populum suum. Finis

Traducido, dice lo siguiente: "Pedro el Romano, quien apacentará a su rebaño entre muchas tribulaciones tras lo cual, la ciudad de las siete colinas será destruida y el tremendo Juez juzgará a su pueblo. Fin."

Aunque la "política" de mi blog es no  pronunciarme a favor o en contra de las creencias religiosas de la gente, que respeto, sí voy a pronunciarme en esta ocasión sobre lo que es una falsa profecía.

Malaquías de Armagh, el presunto autor de esas profecías, fue obispo de Irlanda en el siglo XII y, como hemos dicho, escribió presuntamente profecías sobre los papas desde Celestino II, contemporáneo suyo, hasta el último papa, que sería el sucesor de Benedicto XVI. Pero, pequeño detalle, aunque el libro fue escrito presuntamente en tiempos de Malaquías, se "encontró" en 1595, después de estar "oculto" durante más de 400 años. Los primeros 74 lemas están comentados por un dominico español del s. XVI: Alonso Ciacconio. Entre Malaquías y la aparición de ese libro, nadie había oído siquiera hablar de él.

Además de este sospechoso silencio, tenemos que las profecías de los papas anteriores a 1595, el año en que se "encontró", encajan muy bien, mientras que las profecías posteriores son mucho más vagas y ambiguas. Veamos algunos ejemplos de las profecías que encajan bien:

Ex castro Tiberis (Del castillo del Tíber): Celestino II (1143-1144) nació en Città di Castello, a orillas del Tíber.
De rure albo (Del campo blanco): Adriano IV (1154-1159) era de origen campesino y nació en Saint-Alban (Alba = "blanco, albino").

Ahora, veamos algunos ejemplos de profecías ambiguas:

Vir religiosus (hombre religioso): Pío VIII (1829-1830) pero, ¿fue el único papa religioso?
Fides intrepida (fe intrépida): Pío XI (1922-1939), también aplicable a cualquier papa.

Ya en el siglo XVII, el historiador jesuita Claudio Francisco Menestrier notó que todas las divisas de los Papas, hasta 1590, aluden a características concretas de cada Pontífice: lugar de nacimiento, origen de la familia, cargos ejer­cidos antes de la elección, símbolos de sus blasones, etc. Mientras que, desde 1590 en adelante, los lemas se refieren solamente a cualidades morales, cuya aplicación es muy vaga y puede convenir a más de un Pontífice.

En definitiva, son un gigantesco fraude. La Iglesia Católica no tiene una postura oficial. No las acepta oficialmente como si fuesen un texto canónico (en parte porque contienen lemas de antipapas, aunque también puede que por el demoledor estudio de Menestrier), pero, que yo sepa, no las ha repudiado oficialmente. Si algún amable lector/a tiene información que pueda desmentirme lo agradeceré.

Si tú, amable lector/a, eres católico/a, puedes tener la tranquilidad de que el sucesor de Benedicto XVI no será el último papa. Católicos y no católicos pueden tener la tranquilidad de que el fin del mundo no parece estar a la vuelta de la esquina.

Saludos cordiales,


Conflictos entre cristianos (I): los helenistas

Hola a todos:

Quiero dedicar una serie de artículos a algunos conflictos que tuvieron lugar entre los primerísimos cristianos. 

Muchos idealizan el Cristianismo primitivo, probablemente por esta cita de Hechos de los Apóstoles:

Todos los creyentes vivían unidos y tenían todo en común; vendían sus posesiones y sus bienes y repartían el precio entre todos, según la necesidad de cada uno. Acudían al Templo todos los días con perseverancia y con un mismo espíritu, partían el pan por las casas y tomaban el alimento con alegría y sencillez de corazón. (Hch. 2:44-46)
Es probable que el autor no mienta. Si lo contrastamos con las cartas paulinas, leemos que Pablo dijo que en Jerusalén le pidieron que recordase a los pobres y, además, sabemos que hacia finales de los años 50 llevó una colecta para los pobres de Jerusalén, que debían vivir en la indigencia, probablemente por malvender sus posesiones.

Sin embargo, los primeros cristianos eran hombres y mujeres y, por lo tanto, seres imperfectos y, en consecuencia, también existieron conflictos y rivalidades, algunos más leves y otros más graves.

El primer conflicto que narra Hechos de los Apóstoles es el conflicto entre judeo-cristianos hebreos (de Palestina) y judeo-cristianos helenistas (de la diáspora judía, cuya lengua era el griego). Leámoslo sin intermediarios. 

Por aquellos días, al multiplicarse los discípulos, hubo quejas de los helenistas contra los hebreos, porque sus viudas eran desatendidas en la asistencia cotidiana. Los Doce convocaron la asamblea de los discípulos y dijeron: 
"No parece bien que nosotros abandonemos la Palabra de Dios por servir a las mesas. Por tanto, hermanos, buscad de entre vosotros a siete hombres, de buena fama, llenos de Espíritu y de sabiduría, y los pondremos al frente de este cargo; mientras que nosotros nos dedicaremos a la oración y al ministerio de la Palabra." (Hch. 6:1-4)

Como se sabe, los 7 hombres encargados de la asistencia a las viudas (colectivo muy desamparado en esa época), fueron llamados diáconos. ¿Existió realmente este conflicto? No hay motivos serios para dudarlo. ¿Qué interés podría tener Lucas, que intenta idealizar los primeros años del Cristianismo, en contar un conflicto que no tuvo lugar?

Además, si leemos las cartas auténticas de Pablo, podemos ver que existían los diáconos ¡y diaconisas, como Febe!, algo que, en la Iglesia Católica, les gusta destacar a los partidarios de que pueda haber mujeres sacerdotisas.

En el Evangelio de Lucas tenemos un eco de este conflicto y de su resolución mediante una división del trabajo. Mejor dicho, más que un eco, lo narra con una famosa escena simbólica, la de Jesús en casa de Marta y María, que ha inspirado muchos cuadros como este precioso de Vermeer.


Leamos de nuevo sin intermediarios el texto de esta escena, situada ¿estratégicamente? después de la conocida parábola del buen samaritano:

Yendo ellos de camino, entró en un pueblo; y una mujer, llamada Marta, le recibió en su casa. Tenía ella una hermana llamada María, que, sentada a los pies del Señor, escuchaba su Palabra, mientras Marta estaba atareada en muchos quehaceres. Acercándose, pues, dijo:
"Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje sola en el trabajo? Dile, pues, que me ayude."

Le respondió el Señor:
"Marta, Marta, te preocupas y te agitas por muchas cosas y hay necesidad de pocas, o mejor, de una sola. María ha elegido la parte buena, que no le será quitada" (Lc. 10:38-42)
Este texto ha sido utilizado por algunos para defender que Jesús, salvando las distancias, era feminista, mientras que los hay que lo han utilizado para defender lo contrario. En realidad, opino que el autor no pretendía ni lo uno ni lo otro. Mi tesis es que se trata de una alegoría en la que Marta simboliza los helenistas y María a los apóstoles que se dedican a la "Palabra". Comparando las dos escenas, puede pensarse que el autor da una pista al utilizar en ambas la palabra "Palabra" (también en la versión original griega), valga la redundancia.

Saludos cordiales,

miércoles, 23 de enero de 2013

¿Cuándo se escribió el Evangelio de Marcos? (III)

Continuamos con la serie sobre la fecha del Evangelio de Marcos, el primero en ser escrito. A modo de resumen, una mayoría piensa que se escribió en torno al año 70 basándose en que se predice la destrucción del Templo de Jerusalén (Mc. 13:2). En el extremo contrario, veíamos que una minoría, entre ellos Maurice Casey, defiende que se escribió hacia el año 40.

Para fijar una fecha tope, el Evangelio nos da unas pistas: 

1.Yo os aseguro que entre los aquí presentes hay algunos que no gustarán la muerte hasta que vean venir con poder el Reino de Dios (Mc. 9:1) 

2. Refiriéndose a la destrucción del Templo y la posterior venida de Jesús, se dice: "no pasará esta generación hasta que todo esto suceda... Mas de aquel día y hora, nadie sabe nada (Mc. 13:30-32)

Si interpretamos estos versículos de forma literal, podemos deducir que cuando se escribió el Evangelio de Marcos debían estar vivos unos cuantos de la generación del Jesús histórico. De lo contrario, el autor habría metido un gol en propia puerta. Por esta razón, no me convence la opinión mayoritaria: cuando se destruyó el Templo (año 70), la mayor parte de la generación de Jesús habría desaparecido.

¿Una redacción por etapas?

Algunos autores proponen que el actual Evangelio de Marcos se escribió en varias etapas, lo cual me parece muy verosímil. Como quizás veamos en otro artículo, hay motivos muy serios para pensar que el relato de la pasión de Marcos es de fecha muy temprana, anterior al año 44. El capítulo 13, como vimos en la segunda parte de esta serie, parece encajar con el ambiente de la crisis de Calígula del año 40.

En cuanto a la fecha más temprana posible de la versión final, tenemos que se escribió en algún momento posterior a la decapitación de Santiago de Zebedeo durante el mandato de Herodes Agripa I, que tuvo lugar entre el año 41 y el 44 y está descrita en el Evangelio de Marcos en forma de profecía post eventum.


Se acercan a él Santiago y Juan, los hijos de Zebedeo, y le dicen: “Maestro, queremos, nos concedas lo que te pidamos.”El les dijo: “¿Qué queréis que os conceda?”Ellos le respondieron: “Concédenos que nos sentemos en tu gloria, uno a tu derecha y otro a tu izquierda.”Jesús les dijo: “No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber la copa que yo voy a beber, o ser bautizados con el bautismo con que yo voy a ser bautizado?”Ellos le dijeron: “Sí, podemos.” Jesús les dijo: “La copa que yo voy a beber, sí la beberéis y también seréis bautizados con el bautismo con que yo voy a ser bautizado; pero, sentarse a mi derecha o a mi izquierda no es cosa mía el concederlo, sino que es para quienes está preparado” (Mc. 10:35-40)


A propósito de Herodes Agripa, el de Marcos es el único evangelio que menciona a los herodianos y lo hace siempre junto a los fariseos (3,6; 8,15; 12,13). En Marcos 3,6 se  presenta a los fariseos aliándose con los herodianos para acabar con Jesús. Sin embargo, en la época de Jesús había una profunda enemistad entre fariseos y herodianos. El evangelio de Marcos parece reflejar la situación histórica que se vivió en el breve reinado de Herodes Agripa I (41-44), único período histórico en el que la casa de Herodes contó con el apoyo y las simpatías de los fariseos.

Este argumento, aunque fuerte, no es concluyente, porque la historia demuestra que es posible que dos enemigos se unan coyunturalmente contra un enemigo común.

Por último, aunque se trata de un argumento ex silentio y dicho argumento tiene poco peso, me llama la atención que el Evangelio de Marcos tenga un eco sobre la muerte de Santiago de Zebedeo y, en cambio, no tiene ningún eco sobre la muerte de Pedro, que se estima que tuvo lugar hacia el año 64 aproximadamente. ¿No es extraño que no haya ningún eco? 

En definitiva, no resulta fácil datar este evangelio, pero sí me atrevo a decir que es casi imposible que se escribiese antes de la destrucción del Templo.

Saludos cordiales, 


sábado, 5 de enero de 2013

Algunos bulos navideños

Más de una vez he escrito que este blog pretende ser neutral. No es ni pro-cristiano ni anti-cristiano, sino que trata acerca de historia. 

Hago esta aclaración porque en este blog, en cuestión de creencias, se defiende el juego limpio y se considera que, si se quiere criticar la religión cristiana -algo totalmente legítimo-, debe hacerse sin recurrir a mentiras.

Digo esto porque en estas fechas, es relativamente frecuente encontrarse en la blogosfera con artículos que difunden una serie de bulos sobre el origen del Cristianismo. Estos bulos, basados en un documental pseudo-científico, consisten en decir que los relatos del Nuevo Testamento son plagio de otras religiones.

Para empezar, es normal que entre las religiones haya coincidencias, préstamos y adaptaciones. Por ejemplo, buena parte del Génesis es una adaptación de mitos sumerios. También es más normal todavía que haya coincidencias y préstamos en la iconografía y que las fiestas de una religión se transformen. En nuestro entorno cultural tenemos ejemplos de fiestas paganas cristianizadas como la festividad del solsticio de verano, cristianizada como festividad de San Juan Bautista.

Hechas estas aclaraciones, paso a desmentir algunos de los bulos que circulan por ahí sobre supuestos plagios del Cristianismo:

1. El dios egipcio Horus nació de una madre virgen, Isis.

Este es uno de los bulos más difundidos. Vaya por delante que no pretendo defender que la madre del Jesús histórico fuese virgen, pero sí me interesa desmontar un bulo.

Según el mito egipcio, Horus es hijo de Osiris e Isis.y fruto de relaciones sexuales. Podría citar varios libros serios en los que se mencionan estas relaciones, pero voy a citar una fuente primaria: los Textos de las Pirámides:

Tu hermana Isis viene a ti [Osiris]regocijándose en su amor por ti.Tú la has colocado en tu falo,y depositado en ella tu semilla.Ella está preparada como la estrella Sothis.y Horus que está en Sothissaldrá de ti.
 Y, como una imagen vale más que mil palabras, aquí hay una muestra de que la concepción de Horus no fue virginal. Isis aparece en forma de halcón:



2. El dios hindú Krishna también nació de una virgen.

Suponiendo que fuese cierto, habría que preguntarse cómo es posible que los autores de los evangelios tuviesen conocimiento de un mito tan lejano. Pero el caso es que también se trata de un bulo.

Si buscamos en fuentes serias, podemos encontrar que Krishna es el octavo hijo de Vasudeva -hija del malvado rey Sura- y el soldado Devaki. ¡Extraña virgen que ha tenido 8 hijos!

3. También nacieron un 25 de diciembre una serie de dioses como Mitra, Horus, Dionisio o Attis

Primera cuestión. En ningún lugar del Nuevo Testamento se dice en qué fecha nació Jesús. La celebración el 25 de diciembre es muy posterior.

Segunda cuestión.De los dioses citados, solo Mitra nació el 25 de diciembre.

En algunas webs se llega al delirio de incluir en la lista a personajes de carne y hueso confundiéndoles con dioses (Buda y Zoroastro)


No son estos los únicos bulos que suelen circular por ahí. Al desmentirlos, no pretendo defender la historicidad de la concepción virginal de María ni de otras creencias cristianas. Simplemente, se trata de defender que las creencias no deben combatirse inventándose mentiras. De la misma forma que me desespera que mucha gente difunda cadenas por e-mail sin contrastar si el contenido de la cadena es cierto o es un bulo, también me desespera que haya tanta gente que se crea esos bulos sin abrir un libro de mitología o alguna web fiable para contrastarlo.

Saludos cordiales

jueves, 3 de enero de 2013

Ni Jesús ni su padre fueron carpinteros

En primer y principal lugar, Feliz 2013 a todos.

Interrumpo la serie sobre la datación de Marcos para tratar un tema más propio de estas fechas.

Uno de los mitos del Cristianismo es que el padre de Jesús era carpintero. En el Evangelio de Marcos se refieren a Jesús diciendo: "¿no es este el hijo del carpintero?" y, el Evangelio de Mateo, edita esta pregunta para hacer referencia a Jesús: "¿no es este el carpintero?". Craso error que se debe a la Vulgata, en la que tradujo la palabra griega tekton como "carpintero". Desde entonces, que yo sepa, todas las biblias lo han traducido así. Sin embargo, la palabra tekton quiere decir "constructor", siendo el jefe de un grupo de constructores el archi-tekton.

Es posible que San Jerónimo hiciese esa traducción incorrecta por ser la profesión de carpintero más humilde que la de constructor que, en el s. I (no hay que caer en anacronismos y pensar que las profesiones estaban tan delimitadas como ahora) lo mismo podía realizar tareas de albañil que de arquitecto.

En favor de la posibilidad de que José y Jesús fuesen lo que actualmente llamaríamos arquitectos tenemos algunas parábolas sobre las que no hay motivos serios para dudar que corresponden al Jesús histórico.

Parábola 1:

Todo el que venga a mí y oiga mis palabras y las ponga en práctica, os voy a mostrar a quién es semejante:

Es semejante a un hombre que, al edificar una casa, cavó profundamente y puso los cimientos sobre roca. Al sobrevenir una inundación, rompió el torrente contra aquella casa, pero no pudo destruirla por estar bien edificada. Pero el que haya oído y no haya puesto en práctica, es semejante a un hombre que edificó una casa sobre tierra, sin cimientos, contra la que rompió el torrente y al instante se desplomó y fue grande la ruina de aquella casa (Lc. 6:46-49)

Parábola 2:

¿Quién de vosotros, que quiere edificar una torre, no se sienta primero a calcular los gastos, y ver si tiene para acabarla? No sea que, habiendo puesto los cimientos y no pudiendo terminar, todos los que lo vean se pongan a burlarse de él, diciendo: "Este comenzó a edificar y no pudo terminar" (Lc. 14:28-30).

También tenemos esta frase: La piedra que los constructores desecharon en piedra angular se ha convertido

Naturalmente, estas parábolas sobre arquitectos no prueban que Jesús lo fuese, pero sí resultan coherentes. Además, con relación a la parábola 2, Vitruvio indica en su obra que la primera tarea del arquitecto tras recibir su encargo es la realización de un ajustado presupuesto y una buena administración del gasto.

Saludos cordiales,  

viernes, 28 de diciembre de 2012

¿Cuándo se escribió el Evangelio de Marcos? (II)

Para empezar, Felices Fiestas a todos.

En el artículo anterior comentamos que el argumento principal para datar Marcos en torno al año 70 es la profecía de la destrucción del Templo (Mc. 13:2). Sin embargo, ese versículo es un indicio, pero no una prueba. Mi opinión es que ese texto está sobrevalorado por varias razones:

1. En ese capítulo, a Jesús le preguntan cuándo ocurrirá eso y no responde de forma clara. Solo dice que ocurrirá antes de que pase la generación que le escucha.

2. Profetizar la destrucción del Templo entre el 30 y el 66 sería, exagerando un poco, como profetizar ahora la caída de la dictadura de Bachar al Asad en Siria.

3. El texto ignora en qué época del año será la destrucción del Templo y del sitio de Jerusalén. Jesús dice que se ha de huir y recomienda rezar para que no ocurra en invierno (Mc. 13:18), cuando la toma de Jerusalén fue en verano.

Pero, sobre todo, creo que muchos comentaristas se centran demasiado en el anuncio de la destrucción del Templo ignorando el resto del capítulo. En concreto, creo que resulta clave lo siguiente:

"Cuando veais la abominación de la desolación erigida donde no debe –el que lea esto, entiéndalo bien– los que estén en Judea, que se refugien en las montañas" (Mc. 13:14)
Pregunta clave: ¿qué es la abominación de la desolación?

Esta figura críptica se encuentra en tres versículos del Libro de Daniel y en un versículo de 1 Macabeos. En ambos casos se refiere a una estatua de Zeus con la que Antíoco IV Epifanes profanó el Templo en el s. II antes de nuestra era.

Algunos han interpretado que Marcos se refiere a cuando los estandartes romanos se colocaron sobre el Templo destruido, pero esto es casi imposible porque entonces no tendría sentido la orden de huir.

La interpretación de algunos autores, entre ellos Maurice Casey, es la siguiente.

Hacia el año 40, el Emperador Calígula quiso profanar el Templo de Jerusalén con una estatua suya. Es lo que se conoce como la "Crisis de Calígula", que se prolongó durante meses e hizo temer a los judíos que la guerra era inevitable, declarándose muchos de ellos dispuestos a morir. La crisis se solucionó gracias a una embajada de Herodes Agripa y al asesinato de Calígula en el año 41.

Algunos autores defienden que la abominación de la desolación es la estatua que Calígula quiso colocar. Ello explicaría el término "erigido" que encajaría muy bien con una estatua. Además, el periodo más tenso de la crisis de Calígula tuvo lugar a finales del verano y principios del otoño del año 40, lo que explica mejor la recomendación de rezar para que la huida no sea en invierno. También aclararía la orden dada al lector de que ha de entender bien qué es la abominación de la desolación. Debe entenderlo para explicar a sus lectores que deben huir cuando al erigirse la estatua de Calígula.

Por este motivo, entre otros, Maurice Casey prefiere fechar el Evangelio de Marcos en torno al año 40.

El razonamiento de Casey es inverso al de la mayoría. Mientras que los que defienden una fecha en torno al año 70 diciendo que contiene una profecía que se cumplió (la destrucción del Templo), Maurice Casey defiende una fecha temprana porque contiene una profecía cumplida solo parcialmente (la destrucción del Templo, aunque no es cierto que no quedase "piedra sobre piedra") y una profecía incumplida: la abominación de la desolación, que nunca se erigió en el Templo.

Seguiremos,

Saludos cordiales, 

jueves, 20 de diciembre de 2012

¿Cuándo se escribió el Evangelio de Marcos? (I)

Alguna ocasión se me ha preguntado mi opinión acerca de cuándo se escribieron los evangelios. Estos días voy a tratar acerca de cuándo se escribió el primero de ellos: el de Marcos. La mayoría de los expertos cree que se escribió un poco antes o un poco después de la destrucción del Templo de Jerusalén (70). Sin embargo, hay una minoría que defiende fechas más tempranas.

¿Liberales vs. conservadores?

Es frecuente que se califique de "conservadores" a los que defienden fechas tempranas y "liberales" a los que proponen fechas en torno al año 70. Esto es cierto en muchos casos, quizás en la mayoría, pero no siempre. Es más, apuesto a que cada vez lo será menos. De hecho, en la última década, dos expertos agnósticos, James Crossley y Maurice Casey, este último un prestigioso arameísta que actualmente es Catedrático Emérito, han propuesto que el Evangelio de Marcos se escribió en los años 40. Siendo ambos agnósticos, me parece discutible que se les pueda etiquetar de "conservadores"

¿Tiene importancia la fecha?

En no pocas ocasiones, la cuestión de la fecha se utiliza como arma arrojadiza. Algunos "conservadores" que defienden fechas tempranas vienen a decir que "los evangelios son muy fiables porque se escribieron poco después de los hechos que narran" y, a la inversa, algunos escépticos dicen lo contrario, que son poco fiables porque se escribieron mucho después de los hechos.

Estas dos posiciones son criticables por varias razones. En primer lugar, la fecha no necesariamente da más credibilidad a un texto. ¿Es más fiable, por ejemplo, una biografía sobre Gandhi escrita en 1955 que una escrita en 2000? Es más, algunos historiadores clásicos como Suetonio o Tácito escribieron sobre hechos muy posteriores a su vida. A la inversa, muchas crónicas medievales no demasiado fiables son prácticamente contemporáneas a los hechos que narran.

En segundo lugar, los evangelistas no escribieron "de oídas", sino que tuvieron ante sí algunos escritos previos. Esto permite a algunos autores adoptar posturas intermedias sobre la fecha. Por ejemplo, Gerd Theissen opina que la redacción final del Evangelio de Marcos es entorno al año 71 pero que sus fuentes son bastante tempranas.

Por lo tanto, la cuestión de la fecha es más bien una curiosidad científica.

¿Una profecía post eventum?

El argumento "estrella" de los que defienden que se escribió durante la Guerra Judía (66-74) es que Jesús profetiza la destrucción del Templo diciendo que "no quedará piedra sobre piedra que no sea derribada" (Mc. 13:2)

Este versículo hace pensar a muchos que, salvo que se reconozca que las profecías son posibles, debió escribirse después de la destrucción del Templo o un poco antes. Por el contrario, algunos defienden que, por ejemplo, Savonarola profetizó el "Saco de Roma" efectuado por las tropas de Carlos V y que, según Josefo, un tal "Jesús hijo de Ananías" también profetizó la destrucción del Templo unos años antes de que empezase la guerra.

Intentando dejar a un lado los "a prioris", hay 5 criterios para ver si se trata de una profecía genuina o post eventum, provenga o no del Jesús histórico. Voy a seguir el libro de Adam Winn titulado The Purpose of Mark's Gospel: An Early Christian Response to Roman Imperial 

1. Criterio del detalle. Una profecía detallada es más probable que sea post eventum, mientras que una profecía genérica (p.e las de Nostradamus) es más probable que sea genuina.

Sobre la profecía que nos ocupa, algunos autores creen que se trata de una profecía detallada, mientras que otros piensan que no lo es. Por ejemplo, Maurice Casey dice que la profecía no se cumplió del todo porque no es cierto que no quedase piedra sobre piedra (sobrevive el Muro de las Lamentaciones) o que da la sensación de que sería demolido cuando en realidad fue incendiado.

2. Criterio de la razonabilidad. Adam Winn lo explica con este ejemplo: si alguien reclama haber encontrado una profecía fechada en 1915 que dice que Estados Unidos participará en la I Guerra Mundial, puede considerarse genuina, mientras que una profecía fechada en el mismo año que dice que Estados Unidos se verá involucrado en una guerra en Vietnam, puede considerarse post factum.

En nuestro caso, no hace falta ser un genio ni un profeta para poder profetizar la destrucción del Templo en el s. I. De hecho, Josefo y Tácito citan varias revueltas que tuvieron lugar antes del inicio de la guerra.

3. Criterio de la similaridad. ¿Es Mc. 13 el primer texto del s. I en anunciar la destrucción del Templo? La respuesta es negativa. En un trabajo de Craig Evans se demuestra que en los manuscritos del Mar Muerto existían varias profecías similares en la época del Segundo Templo.

4. Criterio de la motivación. ¿Qué motivo pudo tener Marcos para incluir en su libro esta profecía? Los defensores de una fecha post-70 opinan que demostrar la capacidad de Jesús de profetizar el futuro.

5. Criterio del riesgo. Los defensores de una fecha post-70 defienden que si se escribió antes de la destrucción del Templo, en caso de que no hubiese sido destruido se hubiese hecho el ridículo.

El autor al que hemos seguido, opina que los tres primeros criterios favorecen una fecha anterior a la destrucción del Templo, pero que los dos últimos favorecen una fecha posterior.

Daré mi opinión en las próximas entradas. Saludos cordiales,


jueves, 6 de diciembre de 2012

Tito y Timoteo. ¿Una misma persona?

En el artículo anterior tratamos acerca de los cambios de nombre, una costumbre de los primeros cristianos con antecedentes en el Judaísmo. Hoy vamos a tratar en concreto acerca de si son una misma persona Tito y Timoteo.

Tito y Timoteo son dos colaboradores de Pablo. Una minoría de autores cree con fundamento que son la misma persona. Quién ha desarrollado más esta hipótesis ha sido Richard Fellows, aunque no ha sido el primero ni el único.

Tito es citado en dos epístolas auténticamente paulinas: Gálatas y 2 Corintios. Timoteo es citado en Hechos de los Apóstoles y en 6 de las 7 epístolas indiscutiblemente paulinas (todas menos Gálatas), figurando como co-remitente en 4 de ellas (1 Tesalonicenses, 2 Corintios, Filipenses y Filemón).

De Tito sabemos que viajó con Pablo y Bernabé al llamado Concilio de Jerusalén, que Pablo le encargó una difícil misión en Corinto y que tuvo un importante papel en una colecta que hicieron las iglesias de Grecia para los pobres de Jerusalén.

Timoteo fue circuncidado por Pablo. ¿Y Tito?

Según Hechos, Timoteo, hijo de madre judía y padre griego, fue circuncidado por Pablo en Listra (actual Turquía) a causa de los judíos (Hch. 16:1-3). Si no lo hacía, Timoteo sería visto por los judíos como un apóstata. Este hecho es algo extraño, pese a que en aquella época era mucho más fácil que ahora saber si un hombre estaba circuncidado porque en los gimnasios los hombres estaban completamente desnudos. Si Tito y Timoteo son la misma persona, este hecho, algo extraño, se explica mejor.

En Gálatas Pablo dice que Pablo y Bernabé viajaron a Jerusalén en compañía de Tito. Hechos dice que bajaron acompañados por “algunos” (Hch. 15:2).

La idea de Pablo y Bernabé era convencer a la iglesia de Jerusalén de que los gentiles podían ser “cristianos” sin necesidad de circuncidarse ni cumplir toda la ley mosaica. Sobre esta cuestión, Pablo dice a los gálatas que “ni siquiera Tito, que estaba conmigo, con ser griego, fue obligado a circuncidarse”. Esta frase puede significar dos cosas:

  • Tito no fue obligado a circuncidarse y no fue circuncidado (opinión mayoritaria)
  • Tito no fue obligado a circuncidarse pero lo fue voluntariamente (hipótesis de Duncan, Sanders y otros)

Si, como Gálatas da a entender, Pablo y Bernabé (circuncisos) viajaron solo con Tito, ¿por qué dice “ni siquiera”? Y si, como dice Hechos, viajaron un grupito de gentiles, ¿por qué dice “ni siquiera Tito”? Si Tito es Timoteo y, por tanto, hijo de madre judía, se explica mejor ese “ni siquiera”: tenía un motivo extra para circuncidarse.

Otra cuestión. En esa carta hay un texto muy oscuro que ha hecho que algunos expertos piensen que hay palabras omitidas (elipsis) y, de hecho, en algunas traducciones, la frase acaba en puntos suspensivos. El texto en cuestión es el siguiente:

Pero, a causa de los intrusos, los falsos hermanos que solapadamente se infiltraron para espiar la libertad que tenemos en Cristo Jesús, con el fin de reducirnos a esclavitud, a quienes ni por un instante cedimos, sometiéndonos, a fin de salvaguardar para vosotros la verdad del Evangelio...

Como se ve, esta frase oscura tiene poco sentido y, por eso, se sospecha que falta algo. ¿Una alusión a la circuncisión de Tito/Timoteo?

Tito y Timoteo en Corinto.

Si Tito y Timoteo son dos personas distintas, hay que suponer que Pablo se despidió de Tito y, algunos años después, se encontraron y viajaron juntos a Éfeso. 

En 1 Corintios se dice que Pablo, escandalizado porque entre los cristianos de Corinto se daba, digamos, cierta libertad sexual, habiendo incluso uno que yacía con su madrastra (1 Cor. 5:1), envió a Timoteo a recordarles las normas éticas que predicaba (1 Cor. 4:17). Al parecer, la misión era difícil y Timoteo fue con algo de aprensión, por lo que Pablo pidió a los corintios que le recibiesen bien y procurasen que estuviese sin temor (1 Cor. 16:10). Esta carta llegó por barco mientras Timoteo viajaba por tierra pasando por Macedonia. De hecho, Pablo contaba con que la carta llegaría antes que Timoteo y por eso dice: “si se presenta Timoteo…”

En 2 Corintios no se hace ninguna alusión a este viaje de Timoteo y, en cambio, hay varias alusiones a un viaje de Tito ya pasado. Este es el motivo que ha llevado a algunos autores a sospechar que son la misma persona. Además, las misiones de Timoteo y Tito tenían el mismo objetivo: tratar acerca del libertinaje sexual que se daba en Corinto. Otro dato en común es que, al parecer, siendo la misión difícil, tanto Timoteo como Tito fueron con cierto temor. Veamos:

  • “Si se presenta Timoteo, procurad que esté sin temor entre vosotros” (1 Cor. 16:10)
  • “Nos hemos alegrado por el gozo de Tito, cuyo espíritu fue tranquilizado por  todos vosotros” (2 Cor. 7:13)

Por otra parte, en 1 Corintios Pablo también da instrucciones acerca de una colecta para los pobres de Jerusalén (1 Cor. 16:1-5). Pues bien, Timoteo estaba en camino a Corinto cuando la colecta estaba a punto de comenzar (1 Cor. 16:1-11) y en 2 Corintios se dice que fue Tito quién la comenzó (2 Cor. 8:6). Si Tito y Timoteo son distintas personas, hay que suponer que Tito viajó a Corinto por barco llegando antes que Timoteo, que volvió a Éfeso y que luego partió de nuevo a Corinto para ir después a Macedonia.

Sobre esta cuestión, trataremos próximamente.

Saludos cordiales,

domingo, 2 de diciembre de 2012

Cambios de nombre en los primeros cristianos

Hoy quiero tratar una costumbre que se dio entre los primeros cristianos: cambiar de nombre o utilizar un apodo. Al parecer, esta costumbre no era generalizada, sino que se dio solo entre los más militantes. Esta costumbre es muy lógica si tenemos en cuenta que el Cristianismo salió del Judaísmo (ya hemos dicho que los primerísimos cristianos eras judíos que pensaban que Jesús era el Mesías y que ni Jesús ni Pablo  pretendieron crear una nueva religión) y, en el Antiguo Testamento, también tenemos algunos cambios de nombre como Sarai/Sara, Jacob/Israel y Abram/Abraham. 

Hoy voy a tratar un panorama general y, en los siguientes artículos, comentaré una hipótesis de un cambio de nombre que me parece muy sugestiva.

Discípulos directos de Jesús

El caso más conocido es, sin duda, el de Simón, que pasó a ser conocido como Pedro (en griego) o Cefas (en arameo), que significa "piedra"

Marcos también nos dice que Jesús llamó a Santiago y Juan "Boanerges", que quiere decir "hijos del trueno". Se ignora el motivo de este apodo, pero se ha sugerido que puede ser debido a que eran de carácter impulsivo e incluso "borde", como se aprecia en algunas escenas del Nuevo Testamento.

Otros cambios de nombre o apodos entre los Doce, seguros o posibles (es posible que alguno tuviese un doble nombre), son los siguientes:

- Simón el Cananeo (Mc y Mt) o Zelote (Lc). El que Lucas utilice un apodo distinto tiene una explicación sencilla. Cananeo es la transliteración al griego de la palabra hebrea "qanaim", que quiere decir "celoso" y, Zelotes, es la traducción al griego de dicha palabra. Por lo tanto, son sinónimos.  En la época de Jesús no existía el partido zelote, por lo que este apodo puede significar simplemente que era un hombre celoso de la ley, o sea, un cristiano bastante judaizante.

- Bartolomé. No es un nombre de pila, sino que quiere decir "hijo de Ptolomeo". Se sospecha que puede ser el discípulo al que Juan llama Natanael, que era amigo de Felipe, lo cual concuerda con los evangelios sinópticos, que siempre mencionan a Felipe y Bartolomé juntos. Personalmente, me parece verosímil, pero no pondría la mano en el fuego porque fuesen la misma persona.

- Levi/Mateo. En los tres evangelios sinópticos se menciona un apóstol llamado Mateo. Marcos y Lucas narran que Jesús tuvo una comida en casa de un publicano llamado Leví (escena que ha inspirado un magnífico cuadro de Caravaggio) que luego desaparece. En el Evangelio de Mateo, en cambio, el publicano se llama Mateo y, a partir de entonces, el evangelista habla de "Mateo el Publicano". Puede que Mateo ("don de Dios") fuese un apodo o un segundo nombre.

¿Son realmente Mateo y Leví la misma persona o son dos distintas? Si son la misma persona, ¿por qué Marcos lo oculta? Tal vez porque le pareciese un dato incómodo que Jesús tuviese un publicano en su círculo más estrecho. 

- Tomás. En el Evangelio de Juan el nombre "Tomás" aparece mencionado 7 veces y, en 3 de ellas se dice "Tomás llamado el Mellizo (Dídimo)" En realidad, eso es una redundancia porque Tomás en arameo significa "mellizo", por lo que Tomás y Dídimo significan lo mismo, pero en distintos idiomas. Es algo así como si dijésemos "Juan llamado John (o Joan, Joao...)"

La cuestión entonces es: ¿mellizo de quién? El Evangelio apócrifo de Tomás quizás nos de una pista cuando empieza diciendo: "Estas son las palabras secretas que pronunció Jesús el Viviente y que Dídimo Judas Tomás consignó por escrito"

Por lo tanto, es probable que su verdadero nombre fuese Judas y, como era un nombre muy común y había entre los Doce otros discípulos con el mismo nombre, se le apodase Tomás para diferenciarlo de sus homónimos.

Escritos posteriores hacen a Tomás hermano gemelo de Jesús (los evangelios de Marcos y Mateo dicen que tenía un hermano llamado Judas), pero esos escritos son poco fiables porque vienen a ser novelitas para completar los evangelios (a ellos se deben por ejemplo el buey y la mula, la Verónica y un largo etc de tradiciones) y porque los evangelios canónicos son unánimes en que Jesús no tuvo éxito entre sus familiares.

- Judas/Tadeo. Los evangelios de Marcos y Mateo citan a un apóstol llamado Tadeo. En su lugar, Lucas menciona a "Judas el de Santiago" y, Juan, aunque no menciona la lista de los apóstoles, cita a un "Judas, no el Iscariote". Al haber tres apóstoles con el mismo nombre, parece que a dos de ellos les buscaron un apodo para diferenciarlos y que Lucas prefirió diferenciar a uno de ellos diciendo de quién era hijo.

Entre los discípulos directos de Jesús que no pertenecían al círculo de los Doce, tenemos los siguientes:

- José Barsabás por sobrenombre "El Justo". El prefijo "Bar", como se sabe, quiere decir "hijo de". Por lo tanto, su padre debía llamarse Sabas. No sabemos nada de este personaje, salvo que fue junto con Matías un aspirante a ocupar la vacante de Judas Iscariote y que fue discípulo de Jesús desde el comienzo de su ministerio público. También ignoramos si el apodo fue puesto por Jesús o por sus discípulos.

- ¿María "La Magdalena? Aparece en los 4 evangelios canónicos y ha inspirado algunos apócrifos. La inmensa mayoría de los autores creen que se trata de un gentilicio (de Magdala), pero, como hemos visto en artículos anteriores, una minoría seria (y muchos esoteristas con los que, mal que me pese, coincido en parte) creen que puede tratarse de un apodo porque no consta que existiese en el s. I ninguna localidad llamada Magdala y porque Lucas no dice que era Magdalena sino que era "llamada LA Magdalena"

Migdal o Magdala significan "torre", por lo que puede ser un apodo para honrarla por su trabajo de servir a Jesús con sus bienes y, además, porque había varias mujeres con el nombre de María (el más habitual entre las mujeres judías del s. I) en el círculo de Jesús.

¿Lázaro? Ya hemos tratado de él en artículos anteriores y dijimos que entre negar su existencia (lo cual hacen muchos, incluso creyentes) y creer a pies juntillas el relato de su resurrección estando 4 días enterrado y empezando a oler, hay espacio para opciones intermedias de creer en su existencia pero manteniendo escepticismo sobre el sorprendente relato de su resurrección que solo parece conocer uno de los cuatro evangelistas.

Lázaro (Eleazar en hebreo) era el tercer nombre más frecuente entre los judíos y significa "Dios me ayuda". Era un nombre muy frecuente entre los judíos descendientes de sacerdotes. Como ya comentamos en artículos anteriores, desde que un sacerdote católico francés lo propusiese en el s. XIX, hay una minoría que  sugiere tímidamente que podría tratarse del personaje al que Marcos y Mateo llaman "Simón el leproso"

Discípulos de los apóstoles

Tras la muerte de Jesús también conocemos algunos cambios de nombre:

- José Bernabé. No sabemos si pudo haber llegado a conocer a Jesús. Se nos dice que el apodo Bernabé, que significa "hijo de la consolación" le fue dado por los apóstoles para honrarle por vender una propiedad suya y aportar el dinero de la venta a la comunidad (Hch. 4:36-37).

- Juan Marcos. En Hechos 12 y 13 se menciona a un Juan llamado Marcos. Este sobrenombre quiere decir algo así como "varonil", pero era también un nombre frecuente en el mundo romano. Puede ser un apodo o puede ser un segundo nombre, pues en Roma los nombres estaban formados por tres partes (p.e Cayo Julio César).

- Silas/Silvanus. En Hechos 15:22 aparece un "dirigente" llamado Silas, que acompañó a Pablo durante mucho tiempo y, en Corinto, desaparece y se le pierde la pista. En las epístolas paulinas aparece con el nombre de Silvanus. Desconocemos si es un apodo o se trata de dos partes de un nombre.

- Otros casos mencionados en Hechos son Simeón llamado Negro y Judas llamado Barsabas (¿hermano de José Barsabás?)

Saulo/Paulo

Es otro de los casos más conocidos. He escrito Paulo en vez de Pablo para que se aprecie que la diferencia era de una sola letra.

Ignoramos si Pablo es un apodo que se puso Saulo por humildad (Pablo quiere decir "pequeño" y, además, en sus cartas hay indicios de que no debía ser muy agraciado físicamente) o si, siendo ciudadano romano, Saulo (nombre muy judío) y Paulo eran dos de las tres partes que debían tener su nombre completo.

Discípulos de Pablo de Tarso

Por último, aunque Hechos de los Apóstoles no es nada claro, es probable que Pablo de Tarso honrase con apodos a algunos de sus discípulos. Sobre esta cuestión, voy a basarme en un autor canadiense (Richard Fellows) que ha escrito dos artículos en revistas serias (Tyndale Bulletin y Journal of Studies of the New Testament) sobre dos probables cambios de nombre.

En primer lugar, tenemos el caso de Crispo/Sóstenes. En Hechos se dice que, en Corinto, Pablo reclutó al jefe de la sinagoga, llamado Crispo. Pocos versículos después se dice que los judíos de Corinto azotaron impúnemente a Sóstenes, el jefe de la sinagoga. Para completar el cuadro, la Primera Epístola a los Corintios, una de las 7 epístolas auténticamente paulinas, está encabezada por Pablo y Sóstenes. Por lo tanto, es probable que, ante la paliza recibida, Sóstenes, un judeo-cristiano, emigrase a Éfeso.

La cuestión es la siguiente: después de que el judío Crispo se hiciese cristiano (lo cual no suponía romper con el Judaísmo, insistimos) ¿dejó de ser jefe de la sinagoga y, su sucesor, Sóstenes, también fue reclutado por Pablo? No es imposible, pero Richard Fellows (cristiano protestante) y un teólogo ortodoxo llamado A. Mayrou (subrayo lo de ortodoxo porque un seguidor de este blog es cristiano ortodoxo) consideran más probable que los dos personajes fuesen el mismo y que Sóstenes (fuerza salvadora) sea un apodo.

El interesado puede leer sin intermediarios el artículo de Fellows aquí.

Al segundo caso lo trataré en los próximos días y, si Richard Fellows está en lo cierto, quedarían explicados unos cuantos interrogantes que han hecho correr ríos de tinta. A mí me ha convencido, pero dudo que las jerarquías religiosas sean muy receptivas por sus consecuencias. En cualquier caso, ha logrado publicarlo en una revista seria, lo que ya dice que no es una propuesta hecha a la ligera.

La hipótesis en cuestión (a la que han llegado tres autores de forma independiente) es que son la misma persona... Timoteo y Tito.

Por su importancia, lo trataré en un artículo aparte.

Saludos cordiales,

miércoles, 21 de noviembre de 2012

¿Se armó el Belén? El buey y la mula

Hoy es noticia en los medios de comunicación que ha salido un nuevo libro del Papa titulado La Infancia de Jesús en el que, entre otras cosas, dice que en el portal de Belén no hubo mula ni buey.

Ver la atención que le han prestado los medios de comunicación no sé si debería producir risa o tristeza. Por lo que he visto en un telediario, parece que el libro del Papa no va a tener influencia en los belenistas ni en los que acostumbran a montar un "Belén" en sus casas. Y hacen muy bien porque, si nos ponemos puristas, habría que quitar el río y dejar de cantar lo de "pero mira como beben los peces en el río" (en Belén no hay ningún río) y quitar el castillo de Herodes, que estaba en Jerusalén, a unos 10 km de Belén.

El que cause sorpresa las palabras del Papa sobre el buey y la mula demuestra que la gente en general, incluso los católicos, no están muy familiarizados con el Nuevo Testamento, lo que me produce tristeza porque creo que es importante conocer las religiones en general y sus textos, tanto si se es creyente como si no. Si algún lector no está familiarizado, le invito a que lea sin intermediarios los dos primeros capítulos de los evangelios de Mateo y Lucas, que son los únicos que tratan del nacimiento de Jesús.

¿Dónde aparecen el buey y la mula? Respuesta: en un evangelio apócrifo, en concreto, en el  llamado Pseudo Mateo:

"El tercer día después del nacimiento del Señor, María salió de la gruta, y entró en un establo, y deposité al niño en el pesebre, y el buey y el asno lo adoraron. Entonces se cumplió lo que había anunciado el profeta Isaías: El buey ha conocido a su dueño y el asno el pesebre de su señor"
El texto de Isaías al que se refiere el autor es el siguiente:

Oíd, cielos; escucha, tierra, que habla Yahvé: «Hijos crié y saqué adelante, y ellos se rebelaron contra mí. Conoce el buey a su dueño, y el asno el pesebre de su amo. Pero Israel no conoce, mi pueblo no discierne.» (Is. 1, 2-3)
Visto esto me pregunto, ¿por qué causa tanta sorpresa las palabras del Papa? 

Saludos cordiales,