miércoles, 23 de enero de 2013

¿Cuándo se escribió el Evangelio de Marcos? (III)

Continuamos con la serie sobre la fecha del Evangelio de Marcos, el primero en ser escrito. A modo de resumen, una mayoría piensa que se escribió en torno al año 70 basándose en que se predice la destrucción del Templo de Jerusalén (Mc. 13:2). En el extremo contrario, veíamos que una minoría, entre ellos Maurice Casey, defiende que se escribió hacia el año 40.

Para fijar una fecha tope, el Evangelio nos da unas pistas: 

1.Yo os aseguro que entre los aquí presentes hay algunos que no gustarán la muerte hasta que vean venir con poder el Reino de Dios (Mc. 9:1) 

2. Refiriéndose a la destrucción del Templo y la posterior venida de Jesús, se dice: "no pasará esta generación hasta que todo esto suceda... Mas de aquel día y hora, nadie sabe nada (Mc. 13:30-32)

Si interpretamos estos versículos de forma literal, podemos deducir que cuando se escribió el Evangelio de Marcos debían estar vivos unos cuantos de la generación del Jesús histórico. De lo contrario, el autor habría metido un gol en propia puerta. Por esta razón, no me convence la opinión mayoritaria: cuando se destruyó el Templo (año 70), la mayor parte de la generación de Jesús habría desaparecido.

¿Una redacción por etapas?

Algunos autores proponen que el actual Evangelio de Marcos se escribió en varias etapas, lo cual me parece muy verosímil. Como quizás veamos en otro artículo, hay motivos muy serios para pensar que el relato de la pasión de Marcos es de fecha muy temprana, anterior al año 44. El capítulo 13, como vimos en la segunda parte de esta serie, parece encajar con el ambiente de la crisis de Calígula del año 40.

En cuanto a la fecha más temprana posible de la versión final, tenemos que se escribió en algún momento posterior a la decapitación de Santiago de Zebedeo durante el mandato de Herodes Agripa I, que tuvo lugar entre el año 41 y el 44 y está descrita en el Evangelio de Marcos en forma de profecía post eventum.


Se acercan a él Santiago y Juan, los hijos de Zebedeo, y le dicen: “Maestro, queremos, nos concedas lo que te pidamos.”El les dijo: “¿Qué queréis que os conceda?”Ellos le respondieron: “Concédenos que nos sentemos en tu gloria, uno a tu derecha y otro a tu izquierda.”Jesús les dijo: “No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber la copa que yo voy a beber, o ser bautizados con el bautismo con que yo voy a ser bautizado?”Ellos le dijeron: “Sí, podemos.” Jesús les dijo: “La copa que yo voy a beber, sí la beberéis y también seréis bautizados con el bautismo con que yo voy a ser bautizado; pero, sentarse a mi derecha o a mi izquierda no es cosa mía el concederlo, sino que es para quienes está preparado” (Mc. 10:35-40)


A propósito de Herodes Agripa, el de Marcos es el único evangelio que menciona a los herodianos y lo hace siempre junto a los fariseos (3,6; 8,15; 12,13). En Marcos 3,6 se  presenta a los fariseos aliándose con los herodianos para acabar con Jesús. Sin embargo, en la época de Jesús había una profunda enemistad entre fariseos y herodianos. El evangelio de Marcos parece reflejar la situación histórica que se vivió en el breve reinado de Herodes Agripa I (41-44), único período histórico en el que la casa de Herodes contó con el apoyo y las simpatías de los fariseos.

Este argumento, aunque fuerte, no es concluyente, porque la historia demuestra que es posible que dos enemigos se unan coyunturalmente contra un enemigo común.

Por último, aunque se trata de un argumento ex silentio y dicho argumento tiene poco peso, me llama la atención que el Evangelio de Marcos tenga un eco sobre la muerte de Santiago de Zebedeo y, en cambio, no tiene ningún eco sobre la muerte de Pedro, que se estima que tuvo lugar hacia el año 64 aproximadamente. ¿No es extraño que no haya ningún eco? 

En definitiva, no resulta fácil datar este evangelio, pero sí me atrevo a decir que es casi imposible que se escribiese antes de la destrucción del Templo.

Saludos cordiales, 


sábado, 5 de enero de 2013

Algunos bulos navideños

Más de una vez he escrito que este blog pretende ser neutral. No es ni pro-cristiano ni anti-cristiano, sino que trata acerca de historia. 

Hago esta aclaración porque en este blog, en cuestión de creencias, se defiende el juego limpio y se considera que, si se quiere criticar la religión cristiana -algo totalmente legítimo-, debe hacerse sin recurrir a mentiras.

Digo esto porque en estas fechas, es relativamente frecuente encontrarse en la blogosfera con artículos que difunden una serie de bulos sobre el origen del Cristianismo. Estos bulos, basados en un documental pseudo-científico, consisten en decir que los relatos del Nuevo Testamento son plagio de otras religiones.

Para empezar, es normal que entre las religiones haya coincidencias, préstamos y adaptaciones. Por ejemplo, buena parte del Génesis es una adaptación de mitos sumerios. También es más normal todavía que haya coincidencias y préstamos en la iconografía y que las fiestas de una religión se transformen. En nuestro entorno cultural tenemos ejemplos de fiestas paganas cristianizadas como la festividad del solsticio de verano, cristianizada como festividad de San Juan Bautista.

Hechas estas aclaraciones, paso a desmentir algunos de los bulos que circulan por ahí sobre supuestos plagios del Cristianismo:

1. El dios egipcio Horus nació de una madre virgen, Isis.

Este es uno de los bulos más difundidos. Vaya por delante que no pretendo defender que la madre del Jesús histórico fuese virgen, pero sí me interesa desmontar un bulo.

Según el mito egipcio, Horus es hijo de Osiris e Isis.y fruto de relaciones sexuales. Podría citar varios libros serios en los que se mencionan estas relaciones, pero voy a citar una fuente primaria: los Textos de las Pirámides:

Tu hermana Isis viene a ti [Osiris]regocijándose en su amor por ti.Tú la has colocado en tu falo,y depositado en ella tu semilla.Ella está preparada como la estrella Sothis.y Horus que está en Sothissaldrá de ti.
 Y, como una imagen vale más que mil palabras, aquí hay una muestra de que la concepción de Horus no fue virginal. Isis aparece en forma de halcón:



2. El dios hindú Krishna también nació de una virgen.

Suponiendo que fuese cierto, habría que preguntarse cómo es posible que los autores de los evangelios tuviesen conocimiento de un mito tan lejano. Pero el caso es que también se trata de un bulo.

Si buscamos en fuentes serias, podemos encontrar que Krishna es el octavo hijo de Vasudeva -hija del malvado rey Sura- y el soldado Devaki. ¡Extraña virgen que ha tenido 8 hijos!

3. También nacieron un 25 de diciembre una serie de dioses como Mitra, Horus, Dionisio o Attis

Primera cuestión. En ningún lugar del Nuevo Testamento se dice en qué fecha nació Jesús. La celebración el 25 de diciembre es muy posterior.

Segunda cuestión.De los dioses citados, solo Mitra nació el 25 de diciembre.

En algunas webs se llega al delirio de incluir en la lista a personajes de carne y hueso confundiéndoles con dioses (Buda y Zoroastro)


No son estos los únicos bulos que suelen circular por ahí. Al desmentirlos, no pretendo defender la historicidad de la concepción virginal de María ni de otras creencias cristianas. Simplemente, se trata de defender que las creencias no deben combatirse inventándose mentiras. De la misma forma que me desespera que mucha gente difunda cadenas por e-mail sin contrastar si el contenido de la cadena es cierto o es un bulo, también me desespera que haya tanta gente que se crea esos bulos sin abrir un libro de mitología o alguna web fiable para contrastarlo.

Saludos cordiales

jueves, 3 de enero de 2013

Ni Jesús ni su padre fueron carpinteros

En primer y principal lugar, Feliz 2013 a todos.

Interrumpo la serie sobre la datación de Marcos para tratar un tema más propio de estas fechas.

Uno de los mitos del Cristianismo es que el padre de Jesús era carpintero. En el Evangelio de Marcos se refieren a Jesús diciendo: "¿no es este el hijo del carpintero?" y, el Evangelio de Mateo, edita esta pregunta para hacer referencia a Jesús: "¿no es este el carpintero?". Craso error que se debe a la Vulgata, en la que tradujo la palabra griega tekton como "carpintero". Desde entonces, que yo sepa, todas las biblias lo han traducido así. Sin embargo, la palabra tekton quiere decir "constructor", siendo el jefe de un grupo de constructores el archi-tekton.

Es posible que San Jerónimo hiciese esa traducción incorrecta por ser la profesión de carpintero más humilde que la de constructor que, en el s. I (no hay que caer en anacronismos y pensar que las profesiones estaban tan delimitadas como ahora) lo mismo podía realizar tareas de albañil que de arquitecto.

En favor de la posibilidad de que José y Jesús fuesen lo que actualmente llamaríamos arquitectos tenemos algunas parábolas sobre las que no hay motivos serios para dudar que corresponden al Jesús histórico.

Parábola 1:

Todo el que venga a mí y oiga mis palabras y las ponga en práctica, os voy a mostrar a quién es semejante:

Es semejante a un hombre que, al edificar una casa, cavó profundamente y puso los cimientos sobre roca. Al sobrevenir una inundación, rompió el torrente contra aquella casa, pero no pudo destruirla por estar bien edificada. Pero el que haya oído y no haya puesto en práctica, es semejante a un hombre que edificó una casa sobre tierra, sin cimientos, contra la que rompió el torrente y al instante se desplomó y fue grande la ruina de aquella casa (Lc. 6:46-49)

Parábola 2:

¿Quién de vosotros, que quiere edificar una torre, no se sienta primero a calcular los gastos, y ver si tiene para acabarla? No sea que, habiendo puesto los cimientos y no pudiendo terminar, todos los que lo vean se pongan a burlarse de él, diciendo: "Este comenzó a edificar y no pudo terminar" (Lc. 14:28-30).

También tenemos esta frase: La piedra que los constructores desecharon en piedra angular se ha convertido

Naturalmente, estas parábolas sobre arquitectos no prueban que Jesús lo fuese, pero sí resultan coherentes. Además, con relación a la parábola 2, Vitruvio indica en su obra que la primera tarea del arquitecto tras recibir su encargo es la realización de un ajustado presupuesto y una buena administración del gasto.

Saludos cordiales,